Batas personalizadas pintadas para profesoras
El regalo que emociona: batas personalizadas pintadas a mano para profesoras.
Hay regalos que se olvidan al poco tiempo y hay otros que se quedan para siempre. Una bata personalizada pintada a mano, con los dibujos de los propios niños y sus nombres, no es solo una prenda: es una joya emocional. Es un abrazo que se viste cada día, una forma de decir “gracias” con arte, color y memoria.
Cada fin de curso es un momento especial. Las profesoras han compartido risas, enseñanzas, juegos, paciencia y amor. ¿Qué mejor manera de reconocerlo que con algo hecho con el corazón?. Mis batas personalizadas están diseñadas para eso: para emocionar, para hacer llorar de alegría, para recordar por siempre ese grupo de niños que dejó huella.
¿Cómo lo hacemos?.
Tú envías los dibujos de los niños, o yo diseño diseños, sus nombres y, si quieres, algún mensaje especial. Con ellos, creo una composición artística sobre la bata: cada trazo es respetado, cada color tiene su espacio. Pinto a mano, con dedicación y detalle, sin plantillas ni impresiones. La bata es una pieza única, como lo es cada aula y cada maestra.
Regalo original y práctico
Además de ser emocionante, es útil. Las profesoras pueden usar su bata a diario en clase, sabiendo que llevan consigo el cariño de sus alumnos. Utilizo telas resistentes, lavables y cómodas, para que la belleza no esté reñida con la funcionalidad.
Ideal para fin de curso, jubilaciones o días especiales.
No hay dos iguales. Algunas llevan un arco iris de dibujos, otras los nombres en forma de constelación, flores, soles o corazones. Tú decides. Yo lo pinto.
¿Por qué elegir una bata pintada a mano?.
Porque no hay nada más especial que regalar tiempo, dedicación y emoción. Porque celebrar la vocación de enseñar merece algo a su altura. Porque una bata personalizada no es solo un regalo: es un legado de amor.
Encarga ya la tuya. Haz que el fin de curso sea inolvidable. Porque una seño se merece arte, color… y un pedacito del alma de su clase.